Ir al contenido principal

Anthrax - State Of Euphoria (1988)

Calificación:*****

Cuando vienes de firmar dos álbumes tan buenos como “Spreading The Disease” y “Among The Living”, no es sencillo darle continuidad a semejante oleada de inspiración.  Los neoyorquinos Anthrax habían saltado a la fama con gran rapidez gracias a temas como “Madhouse”, “I Am The Law” o mi adorada “Indians”, convirtiéndose en una de las bandas más grandes de Thrash Metal de su tiempo (a día de hoy lo siguen siendo). Aprovechando la tirada que sus dos últimos álbumes estaban teniendo, el quinteto no tardó en volar hasta Miami (abril del 88) para grabar en los Quadradial Studios su cuarto álbum de estudio, ese que muchos considerarían el último en el que realmente sonaron thrashers (para mí “Persistence Of Time” también ofrece momentos de mucho Thrash).

Su salida vino acompañada de opiniones de todo tipo. Desde luego era un trabajo ambicioso que mantenía vivos muchos aspectos de la banda, pero la contundencia de sus trabajos anteriores tal vez comenzaba a diluirse en favor de un Thrash más elaborado y, en ocasiones, melódico, algo que no todos sus seguidores vieron con buenos ojos.  Desde luego, la producción no es tan convincente como en las dos obras anteriores, pero considero que este “State Of Euphoria”, además de ser exageradamente bueno, mostraba la evolución de la banda y comenzaba a predecir lo que depararía el futuro sonoro a estos músicos.

Comencemos con las canciones…

Con una oscura y dramática, pero a la vez soberbia, introducción de violín a la que pronto se le sumarán las guitarras para desembocar en un riff de máxima calidad nos adentramos en este “estado de euforia”. “Be All, End All”, como hicieron en anteriores entregas dos cañonazos “A.I.R” o “Among The Living”, abren fuego desde el segundo uno, dejando claro que el nombre de Anthrax siempre debe ir asociado al Thrash y debe generar mucho respeto. Las guitarras y el bajo suenan descomunales, mientras que Benante tras los parches hace una ejecución perfecta, marcando con maestría los tiempos. Tampoco está nada mal el siempre pletórico Belladona, un cantante de primera categoría que en este álbum, probablemente debido a la evolución del sonido, se nota especialmente compenetrado con la música, moldeando su voz a las exigentes composiciones de sus compañeros. El habitual sentido del humor que estos americanos solían introducir en sus letras queda relegado a un segundo lugar para abordar un tema tan delicado como el suicidio. Para gran parte de los seguidores de la banda esta es la mejor pista del álbum, y tienen motivos suficientes para justificarlo. No obstante, los dos temas que vienen a continuación, “Out Of Sight, Out Of Mind” y “Make Me Laugh” se antojan como serios competidores a tal consideración. La primera muestra una vez más la clase que Scott Ian posee y lo bueno que es este en la sección rítmica (se nota que es un adorador de Malcolm Young), así como Belladona saca su lado más agresivo con el micrófono, cantando con una rabia no tan habitual. Auténtico temazo.

 “Make Me Laugh” es una canción peculiar que necesita un par de escuchas para que se convierta en una de las mejores de todo el trabajo. Su introducción es pura furia, con un pedaleo de Benante que recuerda al “One” de Metallica, hasta que entran unos versos de lo más curiosos y extraños, hasta desembocar en un estribillo  más propio de estos genios. La letra es una rajada en toda regla contra los predicadores.

Pero si hay una canción que merece la consideración de “clásico” en este álbum esa es “Antisocial”, versión de los legendarios Trust, banda francesa en la que militó Nicko McBrain antes de desembarcar en Iron Maiden. Algún fan de los franceses me matará, pero para mí Anthrax hizo suya esta canción, convirtiéndola en un himno instantáneo del Metal ochentero (si ya de por si no lo era) que hasta la actualidad ha sido usada casi siempre la como última canción en todas sus actuaciones en vivo. Este cover respeta bastante la versión original, pero por el simple hecho de contar con Belladonna a la voz, por la sección rítmica tan acojonante conformada por Scott Ian, Frank Bello y el enorme Benante, y por el bueno de Spitz, quien se marca un gran solo, este tema es, para mí, más ya de Anthrax que de Trust.

Es el turno de otra dupla que a mí, personalmente, me encanta y que está conformada por “Who Cares Wins” y “Now It’s Dark”. Ambas mantienen intacta la esencia del quinteto, pero rezuman una mayor oscuridad en su sonido. La primera goza de una introducción de primerísimo nivel, con un inicio arpegiado muy a lo “Season In The Abyss”, para meter la quinta segundos después y convertirse en otra pieza trepidante de Thrash Metal desenfrenado con mucho peso de los coros y con un destacadísimo Benante tras los parches. La letra vuelve a rajar contra la iglesia. La segunda pista es aún más oscura, con un sonido machacón y más simple sobre el que Belladona se desenvuelve sin problemas (probablemente sea el álbum en el que se le nota más furioso al cantar). A mí me gusta más “Who Cares Wins”, pero esta “Now It’s Dark” no me disgusta nada.

“Schism” es  un auténtico temazo. Una joyita escondida que nunca fue valorada como debía. Los Anthrax más comprometidos con la sociedad lanzaban un mensaje claro de repulsa hacia el racismo y todos los prejuicios de la sociedad de su época (que son los mismos que existen ahora) a través de una canción muy lograda que alcanza su máxima expresión en su bestial estribillo. Aquí tengo que destacar a mi querido Frank Bello (no oculto que es uno de mis bajistas preferidos) por la gran línea que se marca en esta pista, aunque siempre suele firmar grandes actuaciones. En realidad todos los músicos hacen un papelón en esta recomendable canción.

Can ya tell me how it feels to be hated?
Can ya tell me how it feels to be loved?
Can you show me what it means to be respected?
Or is the answer none of the above?

Stephen King inspiró una canción muy peculiar que recibe el nombre de “Misery Loves Company”, en el que Anthrax, sin tampoco abandonar su sonido,  añade una serie de efectos a la voz de Belladona (varias pistas combinadas diría yo) que terminan sonando curiosas (aviso que la primera escucha puede venir acompañada de comentarios negativos, pero pronto se convierten en halagos). Mucha atención al destacable cambio de ritmo que se produce en el tercer minuto y el posterior solo que firma Spitz, así como el acompañamiento tan explosivo que hace Benante tras los parches.

La breve instrumental “13” (no hubiera pasado nada si se la ahorraban porque no aporta gran cosa, aunque sirve para reivindicar el tono humorístico de estos grandes músicos) nos lleva en volandas hasta la última “Finale”, una canción trepidante, machacona y con un gran trabajo instrumental (no puedo dejar de destacar a ninguno de los cuatro músicos), además del siempre acertado Belladona. Tras haber atizado a la Iglesia, a los racistas y haber hablado del racismo, la banda se despide con una letra más disparada y divertida. Un cierre muy acorde para este gran disco.

“Spreading The Disease” y “Among The Living” fueron dos obras claves en la definición y el asentamiento del Thrash Metal en la década de los ochenta. Ambos son obras maestras del género (no pueden tener menos de 5 estrellas) y probablemente son las obras más redondas que Anthrax firmó. Con tales predecesores, “State Of Euphoria” tenía todas las de perder y la crítica fue realmente injusta con este disco. Cierto que el sonido no es tan espídico como en aquellos dos y la producción no está tan lograda, pero sí es capaz de mostrar a una banda que apostó por refinar y llevar a terrenos más melódicos a su Thrash, sin perder la ya mencionada esencia de esta banda (tienen un estilo inconfundible). Por ello siempre he visto este trabajo como una obra muy infravalorada en su catálogo y creo que hay que reivindicarla. De hecho creo que “State Of Euphoria”, tal y como mencioné al inicio del  escrito, es un álbum de transición hacia el futuro sonido que esta banda desarrollaría. No se me ocurriría un álbum mejor que encajara entre la fiereza de “Among The Living” y el encanto del apoteósico “Persistence Of Time”. No puedo darle las cinco estrellas que sí le daría a “Spreading” y a “Among” (depende del día también se las doy al posterior “Persistence Of Time”), pero para mí este álbum es merecedor de un 9 y de mi respeto eterno.

¡Un disco enorme!




Comentarios

Te recomendamos leer...

Extreme - Six (2023)

Calificación: **** * (8) Tras quince años sin lanzar nada nuevo, el Rock celebra el regreso discográfico de una de las bandas más ambiciosas de las últimas cuatro décadas. Y es que desde aquel homónimo debut publicado en 1989 hasta el más reciente “Saudades To Rock” (2008) los americanos Extreme han sido capaces de mantenerse en la cresta de la ola a base de una gran cantidad de composiciones de excelsa técnica y un gusto exquisito. Puede decirse que es una banda que siempre ha tratado de evolucionar y no vivir de las rentas económicas de su aclamado “Pornograffiti” (1990) y, más concretamente, de su mega-hit “More Than Words”. Sinceramente, adoro ese estilo tan vanguardista del grupo que no se ciñe únicamente al Rock clásico, sino que también se permite coquetear con otros estilos tales como el Pop-Rock (en las baladas, claro), Funk o, incluso, ligeros guiños al Rap (siempre me resultaron curiosos los fraseos que Cherone introdujo en algunos temas de “III Sides of Every Story”). N

Iron Maiden - Senjutsu (2021)

Calificación: **** (9) Realmente me parece increíble y emocionante el hecho de poder estar hablándote largo y tendido, querid@ lector/a, de un nuevo disco de Iron Maiden. Y aunque sé que muchos podéis imaginaros el porqué, os lo resumiré de la siguiente manera: ¿a quién no le emociona hablar de la banda más grande de la historia del Heavy Metal?   Está claro que no todos los seguidores supieron aceptar a Maiden tras el “Seventh Son Of A Seventh Son” (motivos que no entiendo, pero habrá que respetarlos) con esa típica muletilla de “yo les perdí la pista desde el SSOASS”. Está claro que hubo un bajón compositivo en la última etapa de Dickinson, especialmente notorio en “No Prayer For TheDying”, pero no creo que “Fear Of The Dark” baje del notable alto. Si ya entramos en la era de Blaze…sencillamente os digo que pocos discos han recibido un trato tan injusto como el “X-Factor” (1995), trabajo oscuro y rompedor que sentó las bases de los Maiden del nuevo milenio. Volvería Bruce al gr

Detrás de la Canción: N.I.B

Si eres fan de Black Sabbath ya conocerás de sobra este clásico de su amplia discografía. "N.I.B" estuvo incluida en su álbum de debut, allá por 1970, siendo uno de los pioneros del Heavy Metal, junto al debut de Coven, entre otros.    El tema está compuesto por una breve, pero gloriosa,   introducción de bajo, "Basically", en la que Geezer Butler, sobran las presentaciones, hace un solo con wah-wah al alcance de muy pocos genios de las 4 cuerdas. Pronto se inicia el riff principal de la canción, tarareado miles de veces por la fanaticada de la banda, y empieza a cantar un sobresaliente Ozzy Osbourne. Hasta ahí nada extraño. Sin embargo, el asunto fundamental por el que se ha escrito este artículo es para abarcar el significado de las siglas "N.I.B", ya que siempre ha existido cierta confusión y polémica a la hora de tratar de explicarlo. Los sectores religiosos, que poco les cuesta buscar alguna pega para denunciar a Black Sabbath o cualquie

The Rolling Stones - Hackney Diamonds (2023)

Calificación: **** *(8) “Well, my mother told my father Just before hmm, I was born "I got a boy child's comin', he's gonna be He's gonna be a "Rollin' Stone"   Creo que no somos plenamente conscientes de la fortuna que tenemos al poder hablar en este momento sobre el lanzamiento de un nuevo álbum de los legendarios Rolling Stones, una banda que no necesita presentación alguna después de más de seis décadas dedicadas al Rock, un género que ellos mismos elevaron a nuevas alturas con una serie de álbumes verdaderamente icónicos que vieron la luz entre las décadas de los sesenta y setenta ("Beggars Banquet", "Let It Bleed", "Sticky Fingers", "Exile On Main St."...). Estos álbumes contienen algunos de los himnos más emblemáticos en la historia de la música contemporánea. Si consideramos el legado musical de los Rolling Stones y su impacto cultural, liderado principalmente por su distintivo lenguaje que pr

Rammstein - Zeit (2022)

Calificación: **** * (9) La maquinaria alemana sigue dando sus frutos. Lo nuevo de Rammstein suena por momentos como un logrado y sorprendente retorno a sus primeros esfuerzos discográficos, aunque tampoco renuncia a incluir elementos más contemporáneos, convirtiéndola así en una de sus obras más ambiciosas y variopintas.  En sus casi tres décadas de trayectoria, Rammstein ha logrado hacer algo de lo que no todas las grandes bandas de Rock y Metal pueden presumir: no dejar a nadie indiferente. No todo el mundo ha sido receptivo con el estilo musical de una de las bandas precursoras del Industrial Metal, así como por sus letras y videoclips, los cuales casi siempre suelen tratar temas que despiertan polémica (no olvidemos el más reciente revuelo despertado por el videoclip de “Deutschland” en el que, durante algunas escenas, aparecían vestido de judíos cerca de ser ahorcados para luego alzarse y ejecutar a las tropas Nazis). Podría decirse, si me lo permiten, que estamos hablando de la

Rush - Moving Pictures (1981)

Calificación: ***** Rush, esa banda formada por 3 genios musicales y que tan poco reconocimiento han tenido en la historia del Rock. Una pena que no se les haya hecho un homenaje. Su discografía goza de grandes joyas, como el trabajo que vamos a reseñar a continuación, el cual se convirtió en el más vendido en su gran carrera. Estamos hablando de su gran "Moving Pictures". Para la mayor parte de los fans de los canadienses, éste es su mejor material junto al sobresaliente "2112".    La música progresiva estaba desapareciendo con la entrada en los ochenta. Bandas como Pink Floyd, Yes o Genesis habían abandonado su estilo, dado al escaso éxito que su sonido estaba teniendo. Con tal panorama Rush entraba  a grabar a finales de 1980 en Le Studio de Quebec. Una grabación que duró poco más de un mes y que, daría como resultado un disco magistral, donde Geddy Lee y sus chicos supieron mantener su estilo, cada vez más progresivo, pero sin despegarse del Rock, que tan

Helloween - Helloween (2021)

Calificación: ***** Parece mentira, pero ya ha llovido lo suyo desde aquel glorioso 14 de noviembre de 2016, día en que Helloween paralizó al mundo del Metal con el comunicado que muchos habían soñado desde hacía décadas:   “Creíste en ello por años y seguiste preguntando por ello. Ahora es el momento. A finales de 2017 Michael Kiske y Kai Hansen volverán a subirse a los escenarios con Helloween y resucitarán la formación legendaria del grupo”. No mucho tiempo antes ya había sucedido lo mismo con los Guns N’ Roses, pero a diferencia de Axl Rose y compañía, el regreso de Kai y Michael a la banda que los hizo grandes fue más allá de los meros intereses comerciales debiéndose más bien a la mayor madurez de Kiske y Weikath para resolver sus problemas y cumplir el deseo de millones de seguidores ,y pienso que de ellos también, por volver a tocar juntos (Kai ya había tocado como invitado especial junto a Helloween, pero Kiske llevaba alejado del grupo desde hacía demasiados años). El p

Arch Enemy - Deceivers (2022)

Calificación: *** * * (7) Con “Deceiver”, los suecos optan por mantenerse en su zona de confort, facturando canciones fieles a su pasado más reciente (y popular) entre las cuales podemos encontrar varias aspirantes a convertirse en “hits”. No esperes innovación, pero tampoco sentirte defraudado. Arch Enemy sigue en pie de guerra.  Es difícil olvidar la variedad de opiniones que emergieron allá por 2014 cuando Arch Enemy y Angela Gossow, la que fuera su vocalista durante más de una década (mi preferida, sinceramente), anunciaron que seguirían caminos distintos, siendo Alissa White-Gluz la elegida para ocupar el puesto vacante. Cuando “War Eternal” vio la luz, muchos recuperamos ciertas esperanzas que los álbumes previos al mismo nos habían comenzado a quitar, así como quedamos convencidos sobre las cualidades vocales de esta joven promesa. Sin embargo, “Will To The Power” fue un disco algo más difícil de aceptar por muchos (me incluyo) debido a su mayor comercialidad y afán por antepon

¡¡AC/DC VUELVE A LO GRANDE EN POWER TRIP!! (Setlist, vídeos, fotos,...)

Foto oficial de Power Trip Siete años después (ocho si empezamos a contar desde la retirada de Brian Johnson) los históricos AC/DC volvieron a subirse a un escenario para reencontrarse con su legión de seguidores en el Power Trip Festival. Este suponía, además, el regreso de Brian a los directos, así como del bajista Cliff Williams, quien había decidido retirarse de toda actividad musical en 2016. Junto a estos, y liderando la banda desde sus orígenes, el incombustible Angus Young demostró mantenerse todavía en un estado de forma envidiable, corriendo de un lado a otro del escenario.  Como si el tiempo no hubiera pasado por esta banda inmortal, el show del grupo se alargó más allá de las dos horas con un set lleno de sorpresas por el regreso de temas que hacía mucho tiempo que no tocaban ("Dog Eat Dog", "Stiff Upper Lip" o "Riff Raff") y el debut de dos temas de su más reciente LP, "Power Up" que vio la luz en tiempos de pandemia ("Shot In T

Queens Of The Stone Age - In Times New Roman (2023)

Calificación: *** * *(8) “Truth is, face to face, you're a coward.  Sharp as a paper machete” Podría decirse que los últimos años han sido realmente complicados para Josh Homme, líder y genio tras la música de uno de los máximos exponentes del Dessert Rock, Queens Of The Stone Age. Y es que el rubio ha tenido que hacer frente a diferentes problemas tales como un cáncer ya superado que le mantuvo fuera de los focos durante varios meses, las pérdidas de dos amigos como Mark Lanegan y Taylor Hawkins o una todavía activa disputa legal por la custodia de sus hijos contra su ex mujer, Brody Dalle (The Distillers). Con todo este caos acumulado, da la sensación de que Josh volvió a entrar en el estudio para llevar a cabo una especie de “terapia musical” donde ha tratado de concentrar todo sentimiento negativo en una colección de 10 canciones completamente nuevas y que ha terminado convirtiéndose en “In Times New Roman”, la nueva obra de su banda. Bajo el sello de Matador Records y la