Calificación: **** * Uno de los discos más esperados de 2016, dentro del amplio catálogo de lanzamientos programados para este año, era el regreso de Airbourne, una de las bandas más grandes de Australia por derecho propio. Tras su debut (no oficial) "Ready to Rock", publicado en 2004 bajo el sello Sik Kitty Productions, un trabajo desconocido para la mayoría de los fans, el conjunto fichó por Roadrunner Records, discográfica que los llevó al éxito. Su primer gran álbum, con el que se dieron a conocer internacionalmente demostrando su potencial y por qué se merecían la oportunidad , fue "Runnin` Wild" (2007), seguramente su mejor disco. Es en este momento donde todos los medios comenzaron a hablar de los australianos como "Los herederos de AC/DC" (y razón no les faltaba), un positivo "estigma" con el que han tenido que convivir durante casi una década. Tres años después veía la luz su "No Guts. No Glory", otro discazo que no ...