Seven
deadly sins
Seven ways to winSeven holy paths to hell
and your trip begins.
Seven downhill slopes
Seven bloody hopes
Seven are your burning fires
Seven your desires...
Con esas dos estrofas abre el álbum que ocupa esta
extensa reseña. Y es que hablar del "Seventh Son Of A Seventh Son" da
para rato porque es no es el típico disco de Iron Maiden.
Para entrar en situación, dos años antes la banda
lanzó "Somewhere In Time" (1986), un disco en el que la banda
comienza a incluir los sintetizadores en sus composiciones, algo que comenzó a
generar división de opiniones entre su fanaticada, entre los que estaban a
favor y los que se oponían por completo a este. Maiden, ignorando las críticas,
decidió que su siguiente LP no solo tendría un sonido similar a su predecesor,
o incluso con más sintetizadores, sino que además se caracterizaría por un
aspecto que ningún otro disco de la banda había tenido hasta aquella fecha:
sería conceptual.
Para muchos este "Seventh Son Of a Seventh
Son" es el último gran disco de Iron Maiden, para otros este ya forma
parte del declive y otros opinan que todavía quedaban por salir a la venta un
par de discos de primer nivel del quinteto británico. Desde mi humilde opinión,
soy muy fan de este disco y creo que la banda tuvo la suficiente personalidad
como para ser fiel a sus creencias y experimentar todo lo que se les antojara
con su música.
Por aquellos tiempos Bruce Dickinson, tras haber
visto como todas sus propuestas para el "Somewhere In Time" habían
sido rechazadas, sentía que su papel en el grupo se limitaba a cantar lo que el
resto de sus compañeros, principalmente Steve Harris, componían. Todo esto
cambió cuando el propio Harris llamó a Bruce para comunicarle sus planes del nuevo
álbum conceptual y para pedirle que compusiera un par de pistas que pudieran
incluirse en esta. Y es que todos los miembros, menos Nicko, intervinieron en
la creación de las canciones que compusieron un álbum que supone el momento de
mayor capacidad compositiva del quinteto- El nuevo material se grabó en poco
más de un mes en los Musicland Studios de Múnich (Alemania) bajo la tutela del
más que famoso Martin Birch.
¿Pero y por qué es un álbum conceptual?
"Seventh Son Of a Seventh Son" cuenta la
historia del séptimo hijo de un séptimo hijo que al nacer heredó unas
capacidades psíquicas especiales que condicionarán por completo su vida. A esta
historia se suman otros temas como la lucha entre el bien y el mal, la codicia
humana, el amor arrebatado, las pesadillas y la inmortalidad. Esta creación es
obra del inquieto Steve Harris, quien, tras leer el libro "El séptimo
hijo" de Orson Scott, sintió la necesidad de crear una historia alrededor
de su argumento.
Existen numerosas interpretaciones posibles sobre
cada letra, lo que termina influyendo en el argumento global de la historia. Al
final del análisis de cada canción, amig@ lector/a podrás encontrar un análisis
lírico de lo que yo he interpretado al leer detenidamente la letra. Sin mucho
más que decir, empezamos con este análisis a un discazo como el "Seventh
Son Of a Seventh Son" de Iron Maiden:

La
letra: Lucifer, el ángel caído, conoce el advenimiento del
séptimo hijo y trata de acabar con él nada más nacer pues supone un estorbo en
sus maléficos planes. La madre de este, Babilonia, la ramera, personaje bíblico
y madre del séptimo hijo, recibe la visita de Lucifer, quien trata de
convencerla para que mate a su propio hijo. Para ello la amenaza con iniciar
una matanza indiscriminada de niños que este está maquinando. Esto deriva en
una batalla entre las fuerzas del bien y del mal, en la que está en juego la
posesión del niño. En plena lucha, Lucifer aprovecha un descuido para acercarse
al supuesto séptimo hijo y asesinarlo. Lamentablemente para él, no era ese niño
a quien tenía que matar, sino que se trataba de un bebé normal y corriente. El
verdadero séptimo hijo se había dado a la fuga.
Aunque es difícil, por no decir imposible, quedarse
con un solo tema, sin duda
"Infinite Dreams" es de las grandes composiciones del álbum. A lo
largo de sus 6 minutos tiene todo lo que se le puede pedir a una gran creación
de Maiden: numerosos cambios de ritmo, solos, guitarras gemelas, un bajo
cabalgante y melodías que inundan un
tema en el que, de nuevo, un dramático Dickinson brilla con el micrófono,
tirando de auténtica maestría y un arsenal de registros que están al alcance de
un par de genios más solamente. Por canciones así es por las que me declaro
amante del Heavy Metal.
La
letra: Cada vez que sueña en la noche, el séptimo hijo
recibe mensajes enigmáticos que comienzan, progresivamente a agobiarle y a
crear en él sentimientos de miedo e indefensión. Sin embargo, poco a poco,
nuestro protagonista comienza a descubrir que aquellos mensajes son
revelaciones importantes que está recibiendo, pero a las que teme, puesto a que
no está seguro de si él realmente quiere ser conocedor de todas las verdades.
Tras decidir alejarse de los sueños por ser
demasiado complejos y duros para su juventud, vuelve a sentir, aunque ya sea un
poco tarde, la necesidad de descubrir más verdades sobre la vida.
Con un espíritu más de single tenemos la querida "Can I Play With Madness?",
coreada hasta la saciedad en cada presentación de la banda. Si bien puede
desentonar por ser, aparentemente, más sencilla que el resto, nadie puede
resistirse a su espíritu macarra y fuera de la ley. Quiero añadir que en el
videoclip que acompaña al tema actúa el eterno Graham Chapman, miembro de los
Monty Python, en una de sus últimas apariciones antes de su lamentable pérdida
poco tiempo después.
La
letra: El séptimo hijo, después de los sueños que ha
vivido, roza la demencia total, y trata de huir definitivamente de todos los
enigmas que lo atormentan cada noche. Para ello acude a un profeta, que en un
principio no ve nada en su bola de cristal. El joven protagonista amenaza al
sabio, quien termina vaticinándole un futuro en el mismito infierno.
La
letra: Han pasado unos años desde que el séptimo hijo
visitó al profeta, y el mal no ha dejado de destrozarle la vida. Poco después
de conocer al amor de su vida, alguien ha terminado con su vida y con la
de su suegro. El protagonista, impotente,
muestra su dolor e ira ante tal hecho y pide volver a reencontrarse rápidamente
con ella.
Ahora que el séptimo hijo no tiene ataduras, decide
emprender el viaje que su condición de séptimo hijo le ataba a hacer.
A lo tonto ya vamos por la mitad del disco. Todo
marcha muy bien, y con la llegada de la homónima "Seventh Son Of A Seventh Son", aún mejor que nos va a ir. Para
todos los detractores de los sintetizadores, esta canción debe causar más de un
sarpullido, cosa que, pese a que respeto todo tipo de opiniones, no termino de
entender. La inclusión de estos en el sonido de la banda no queda nada mal.
Bajo una base sólida instrumental, comandada por la dupla Nicko-Harris, Bruce
canta en tono diabólico. Otro memorable estribillo, y post-estribillo. La parte
intermedia es más suave, un recurso también muy propio de "la
doncella". Esta parte destaca, además de por el in crescendo instrumental
que la banda va poco a poco realizando y por la narración de Bruce, por la
enorme presencia del sintetizador, que aporta una ambientación mucho más
tétrica al tema. Pero llega el minuto 6:52 y explota de nuevo la máquina, esta
vez con una buena dosis de punteos de guitarra
y con una magna demostración de lo que los músicos que compusieron, y
aún componen, la banda eran capaces de
hacer con sus diferentes armas de guerra. Un corte que vale su peso en oro.
La
letra: Este tema supone un inciso en la trama,
centrándose más en contarnos más de cerca la historia y la vida del séptimo
hijo. Este se inicia siendo narrado desde la perspectiva de sus hermanos que le
esperan, conscientes de su importancia y de sus poderes.
El "prota" crece bajo las influencias del bien
y del mal que tratan constantemente de atraerle hacia uno u otro bando. Sus
poderes son los de son sanar y la segunda visión, que es la predicción del
futuro.
Continuamos la marcha con "The Prophecy". Canción de gran calidad donde llama la
atención la interpretación vocal de un Bruce Dickinson que, en los puentes, se
interrumpe a sí mismo, un elemento muy interesante y curioso. Canción accesible para todo oyente que quiera
iniciarse en el maravilloso mundo de Iron Maiden. La bella melodía acústica,
acompañada por el brillante bajo de Harris, nos conduce directamente hasta el
final del sexto asalto.
La
letra: El protagonista, que ya no es un aprendiz, se ha
inclinado definitivamente por el bien y, conocedor de sus facultades, trata de
ayudar a una aldea que corre serios peligros en un futuro cercano. Sin embargo,
al llegar al lugar, los habitantes no creen lo que aquel personaje les cuenta.
El séptimo hijo no sabe exactamente lo que va a ocurrir, pero está seguro de
que el pueblo tiene los días contados y debe tratar de convencer a sus
pobladores de que estos dependen de su visión del futuro para evitar una
desaparición segura. Mientras, Lucifer mira sonriente aquella escena.
Pero los aldeanos no solo no le creen, sino que
cuando sucede el desastre, le echan la culpa a este, creyendo que trajo una
maldición. El protagonista, se lamenta
tras perder esta batalla con el mal, y sigue su camino, solo y aterrorizado
ante un futuro cargado de sucesos terribles que está condenado a saber antes de
que ocurran.
No tardará en arrancarse de nuevo Steve Harris, con
sus dedos mágicos, cabalgando sobre su bajo y creando una línea sobre la que el
resto de sus compañeros poco a poco se irán uniendo para conformar "The Clairvoyant". Los versos
son una delicia, especialmente gracias a Dickinson y su prodigiosa voz y los
solos rozan la locura a base de técnica y mucha, pero mucha, velocidad. Como en
prácticamente todo el resto del disco, el estribillo nos vuela la cabeza y nos
obliga a corearlo hasta que nos quedemos sin aliento.
La
letra: El suceso producido en el pueblo provoca que el
séptimo hijo comience a cuestionarse si el futuro que ve es cierto o no,
empezando a ser incapaz de distinguir la realidad de la fantasía. Pronto
descubrirá la aparente limitación que su
segunda visión poseía: no podía predecir su propia muerte, lo que le lleva a
temer que la reencarnación realmente exista para él, teniendo que vivir
eternamente en un mundo que odia.

La
letra: Decepcionado ante la vida, las atrocidades que
inundan esta y otros aspectos negativos, la vida del séptimo hijo se apaga
progresivamente, sabiendo que fracasó en su lucha contra la maldad que impera
en el planeta.
A pesar de las críticas recibidas durante estos años por el cambio de sonido, el álbum vendió en poco tiempo más de 500.000 copias en los Estados Unidos, permaneciendo en el Top 20 de ventas durante muchas semanas, así como en otros lugares del mundo como el Reino Unido (100.000 copias) . Los cuatro singles promocionales que se lanzaron, terminaron llegando a entrar en el TOP 10 de muchos países. Este éxito sirvió para que Maiden encabezará la edición del Monsters Of Rock de aquel mismo año, junto a otras bandas como Kiss, Megadeth, Guns 'N Roses o Helloween (¡vaya cartel!).
Al menos una vez en la vida, y me parece hasta poco,
todo metalero debe invertir parte de su tiempo en escuchar esta obra maestra
del Heavy Metal. Iron Maiden fueron, son y serán, junto a un par de bandas más,
los reyes del género, y gran parte de ese éxito es por trabajos como este
"séptimo hijo de un séptimo hijo"
UP THE IRONS!!!
Seven
deadly sins
Seven ways to win
Seven holy paths to hell...
Seven downhill slopes
Seven bloody hopes
Seven are your burning fires
Seven your desires
Seven ways to win
Seven holy paths to hell...
Seven downhill slopes
Seven bloody hopes
Seven are your burning fires
Seven your desires
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