Ir al contenido principal

Lordi - Screem Writers Guild (2023)

Calificación:*****

Los fineses Lordi, la popular banda originaria de Finlandia que en 2006 conquistó Europa con su hit “Hard Rock Hallelujah”, vuelve a la carretera con un nuevo disco solamente, algo especialmente llamativo si tenemos en cuenta que ha pasado solamente un año de la publicación de “Lordiversity”, una colección de seis álbumes completamente nuevos donde apostaron por abarcar diferentes subgéneros musicales (lo cierto es que salieron bien parados en todos).

En esta ocasión el quinteto presenta “Screem Writers Guild”, un LP cuyo título es, realmente, una parodia de la Screen Writers Guild, una popular organización de guionistas que existió en los Estados Unidos en los años 30. Sin llegar a ser una obra conceptual, el grupo afirma que sus letras están, casi en su totalidad, inspiradas en las horror movies del siglo pasado.  

¿Es posible lanzar nueve álbumes en menos de tres años sin mostrar en algún momento cierta falta de inspiración? Creo que el lanzamiento que comienzo ya a analizar nos servirá para dar respuesta a este interrogante.

Podría decirse que los fineses ponen toda la carne en el asador en ese estelar inicio que supone “Dead Again Jayne”. Tras una introducción de teclados macabros que parecen sacados de una película de miedo, la guitarra y la batería entran en acción construyendo la canción más salvaje de todo el LP. La potencia y malas intenciones de los versos da paso a uno de esos estribillos corales que tanto gustan a Mr. Lordi y sus secuaces. Acierto incuestionable.

Casi siempre, Lordi suele abrir sus LPs con una de esas introducciones atmosféricas con tintes humorísticos que ellos bautizan como “SGC” (de hecho en muchos álbumes, como precisamente sucede en este, incluyen más de uno). Lo llamativo es que en esta ocasión la han ubicado en segundo lugar, recibiendo el título de “SGC XVIII: Nosferuiz Horror Show”, donde un personaje extraño, que suponemos que es el tal Nosferuiz, nos da la bienvenida a un supuesto programa de terror valiéndose de un inglés bruto. Dando continuidad al concepto del show de miedo, “Unliving Picture Show” se conecta con la pieza previa y nos trae a los Lordi más ochenteros y melódicos. Si bien la mayor parte de los elementos que presenta esta pista suenan a “refrito” de ideas ya explotadas (que me gusta el estilo de Lordi, pero no puedo negar a veces su excesiva repetición de recursos), rescato los excelentes teclados del estribillo, así como el guiño lírico a numerosos personajes del cine de miedo clásico como el Hombre Lobo o Frankenstein.

Un riff distorsionado y bien apoyado en numerosos sintetizadores nos da la bienvenida a una vistosa “Inhumanoid”, pieza que te engancha con el paso de las escuchas hasta convertirse en una de tus predilectas. Mucha atención a su estribillo tan “de la casa” y que funciona de maravilla.

La ya conocida “Thing In The Cage”, pieza elegida como single de adelanto del disco, no termina de convencerme pese a la cantidad de oportunidades que le he dado. Sí, tiene una introducción curiosa (no es habitual ver a Mr. Lordi haciendo algo muy parecido al «Khoomii», el popular canto gutural de Mongolia), pero de resto da la sensación de haberla escuchado antes.

“Vampyro Fang Club” se mantiene en la tesitura melódica habitual de la banda, pero sale mejor parado que el edulcorado error previo. Obvio que a estas alturas del LP estoy estrenando un poco más de garra (solamente el primer corte ofrecía algo de esa garra que distinguió a los primeros Lordi). En todo caso, no está nada mal esta pieza donde los teclados y los coros dejan un sabor de boca realmente dulce.

Mr. Lordi se nos pone meloso y se marca una radiofónica balada titulada “The Bride”, en la que, líricamente hablando, el monstruo creado por el doctor Frankenstein se dirige a su novia. No sé si Mary Shelley vomitaría en su tumba si viera a aquella criatura creada a partir de cadáveres tocando el piano y dedicándole una canción a alguien, pero este experimento de los fineses funciona,  aunque obviamente podamos definirla como “la típica power ballad” de Hard-Rock. Buena interpretación vocal y aún mejor el solo de guitarra.

Superada la primera mitad del disco, nos adentramos en las atmósferas opresivas de “Lucyfer Prime Evil”, uno de los puntos más álgidos de la producción. Y es que en cuanto Lordi sube ligeramente los decibelios, raro es que no convenzan. Pista algo más acelerada que, si bien no llega al Speed de “Dead Again Jayne”, logra inyectar algo de dinamismo a un trabajo donde predominan los cortes a medio gas. No, no es perfecta, pero tiene los elementos suficientes para ser tenida en cuenta (el mejor solo de guitarra de la obra, un estribillo facilón y una estructura que no suena especialmente repetitiva).

Las guitarras que irrumpen al inicio de “Scarecrow” anuncian un nuevo retorno a las melodías que tanto gustan al quinteto desde hace ya unos años. Cuatro minutos que pasan sin pena ni gloria, donde la falta de creatividad condena a esta pista a caer en el olvido. Completamente anecdótica…completamente descartable.

Si bien puede pecar de recaer en la sobreexplotación de una serie de recursos sonoros, el trabajo de percusión y sintetizadores en “Lycantropical Island” suenan ligeramente más pesados que de costumbre. No obstante, tampoco estamos hablando de un tema para escuchar con asiduidad. Afortunadamente, la cosa mejora ligeramente gracias a “In The Castle Of Dracoolove”, una canción adornada por un riff ochentero compacto y que encaja bien con la pista de teclados que lo acompaña.

Encaminamos la recta final del álbum con una nueva entrega de la mencionada saga “SCG”, titulada en esta ocasión “The SCG Awards”, en la que se parodia una entrega de premios (los fragmentos de las “películas nominadas” que se escuchan tienen su gracia). Justo después se inicia “Heavengeance” y, siendo realista, vuelve a dejarme muy frío por culpa de un nuevo refrito innecesario de las mismas ideas de siempre.

“End Credits” cierra aceptablemente el disco. Su tono baladístico se aleja de los excesos románticos de “The Bride” y apuesta por inyectar un tono más lúgubre al tema. Un omnipresente piano se convierte en el compañero de viaje perfecto para Mr. Lordi, quien siempre que saca su faceta más dramática suele cumplir. Tras un solo épico de guitarra, se incorporan los coros para una conclusión masiva.

 

CONCLUSIÓN

Para bien y para mal, “Screem Writers Guild” tiene todo lo que cabría esperar de los Lordi actuales. Si bien hay un par de canciones más destacables (no creo que ninguna pase a la historia más dorada del grupo, sinceramente), en general se respira cierta monotonía. Estamos ante un álbum adecuado, pero que no termina de alzar el vuelo. Títulos previos y cercanos en el tiempo como “Killection” o un par de esa saga bautizada como “Killection” me dejaron mejor sabor de boca (no hablemos ya de los primeros LPs de estos fineses). Tampoco llega al nivel de decadencia de “Sexorcism” o “Monstereophonic”, pero es muy irregular.

Comentarios

Te recomendamos leer...

Avatar - Don't Go In The Forest (2025)

Calificación: **** *(8) A finales de 2025 recibimos una nueva entrega —la décima de su carrera— de mis queridos Avatar, una de las formaciones más representativas del Metal Contemporáneo. Con cada lanzamiento, el grupo ha seguido escalando peldaños dentro de la escena actual. Cierto es que su más reciente “Dance Devil Dance” (2023), aunque volvió a demostrar la capacidad del quinteto para llevar su teatralidad y su mezcla de metal, groove y espectáculo a nuevas cotas, terminó sintiéndose algo por debajo de joyas previas como “Feathers & Flesh” o “Hail the Apocalypse”. Sin embargo, lejos de dejarse arrastrar por la opinión de la crítica, Avatar jamás ha renunciado —ni lo hará— a seguir el rumbo que su instinto creativo les dicta. Y en este nuevo álbum, titulado “Don’t Go In The Forest”, la banda vuelve a dejarse guiar por su ambición y su empeño en no repetirse jamás. Desde el primer corte se percibe que quieren jugar sus cartas con el riesgo habitual. “Tonight We Must Be Warriors...

Soulfly - Chama (2025)

Calificación: *** * *(7,5) “Chama” —palabra brasileña que significa “llama”, pero también “vocación” o “llamado”— es el decimotercer álbum de estudio de los siempre sólidos Soulfly. Al frente, Max Cavalera continúa liderando el proyecto junto a sus hijos Zyon Cavalera (batería y co-producción) e Igor Amadeus Cavalera en el bajo. Para este nuevo capítulo, el grupo parece decidido a recuperar el espíritu crudo y primitivo de su debut, pero sin caer en la simple nostalgia. Las expectativas eran altas tras el excelente “Totem” (2022), y la banda no decepciona. El álbum se abre con “Indigenous Inquisition”, una introducción instrumental que funciona como un auténtico ritual tribal. En poco más de dos minutos, entre percusiones, cánticos chamánicos y un riff denso, Soulfly nos arrastra a un mundo ancestral. Un arranque perfecto para preparar el cuerpo y la mente para lo que viene después. El primer sencillo, “Storm The Gates”, es un grito de guerra que parece sacado directamente de lo...

Volbeat - Seal The Deal & Let's Boogie (2016)

Calificación: *** * *(7,5) Cuando Volbeat lanzaron “Seal The Deal & Let’s Boogie”, allá por junio de 2016, ya no eran aquella banda underground que había sorprendido al mundo con su singular mezcla de Rockabilly, Metal y Hard Rock. Para entonces, se habían convertido en toda una institución del metal europeo contemporáneo. Este fue su sexto álbum de estudio y el primero tras la marcha del guitarrista original Thomas Bredahl, siendo el mismísimo Rob Caggiano (ex–Anthrax) quien tomó el relevo. El disco marcó una clara evolución en su sonido: más refinado, con un enfoque melódico aún más pronunciado y una producción pensada para grandes escenarios. Poulsen y compañía apuntaban directamente a los estadios, buscando equilibrar su ADN metálico con ese rock de raíces americanas que siempre los había inspirado. Aunque algunos los acusaron de haberse “ablandado”, lo cierto es que “Seal The Deal & Let’s Boogie” resulta un trabajo sumamente disfrutable —con algún tema algo más flojo, t...

Kiss - The Solo Albums (1978)

Corría el año 1978, y Kiss se había consolidado como una de las bandas más poderosas de la época, tanto en términos musicales como financieros. Sin embargo, las tensiones entre los miembros de la banda empezaban a surgir. La hostilidad se desató cuando Ace Frehley expresó públicamente su deseo de abandonar la banda para grabar su propia música, liberándose de la influencia de sus compañeros. Afortunadamente, Paul y Bill Aucoin lograron persuadir a Ace para que se quedara, proponiéndole la opción de grabar un álbum en solitario. Esto satisfizo al guitarrista, quien sugirió que cada miembro tomara un tiempo para grabar su propio disco en solitario para, pasado un tiempo, lanzarlos todos bajo el propio nombre del grupo. La idea no terminó de contentar a Casablanca, la discográfica que llevaba al grupo en aquel momento, quienes veían como descabellado el hecho de lanzar cuatro LPs en un solo día y las posibilidades más que altas de que esto se tradujera en pérdidas para esta como para ...

Crónica del Concierto de Volbeat en el Palacio Vistalegre, Madrid (31/10/2025)

Ni la avalancha de actividades con motivo de la festividad de Halloween por toda la capital logró eclipsar el magnífico espectáculo que ofreció Volbeat anoche en el Palacio Vistalegre madrileño. Confieso que era la primera vez que veía a los daneses en directo, y no pudo ser en mejor momento: el grupo atraviesa una etapa espléndida, presentando un disco notable como “God Of Angels Trust” y girando por Europa acompañado de dos propuestas muy interesantes, Bush y Witch Fever. Según la organización, la visita a Madrid rozó el lleno absoluto, convirtiéndose en la actuación más multitudinaria que Volbeat ha ofrecido hasta la fecha en nuestro país. El viaje desde Tenerife el mismo día del concierto y una inevitable parada para reencontrarme con viejos amigos me impidieron llegar a tiempo para el inicio de Witch Fever, formación de la que había oído hablar muy bien y que tendré que descubrir en otra ocasión. Tan justo fue el tiempo que apenas un minuto después de ocupar mi asiento en grada,...

Mammoth WVH - Mammoth WVH (2021)

Calificación: **** Me pregunto qué se sentirá cuando compartes el mismo apellido que uno de los guitarristas más influyentes y más técnicos de la historia. El simple hecho de decidir dedicarte a la música como tu padre puede derivar en el siguiente proceso: en un primer momento, es más sencillo que la prensa musical te haga caso por ser “el hijo de…”, pero eso a la larga, más aún si el estilo que practicas es igual o muy parecido al de tu progenitor, puede terminar en odiosas comparaciones con él y tienes todas las de perder. Wolfgan Van Halen, el hijo del mismísimo EDDIE VAN HALEN, a quien siempre recordaremos con un cariño especial, ha roto un poco con esa tendencia y, a partir de mucho trabajo y de una habilidad envidiable para tocar guitarra, bajo y batería ha despertado el interés de numerosos artistas como Mark Tremonti o Clint Lowery para sus trabajos en solitario, aunque su mayor hito ha sido, sin duda, tocar junto a su padre en la reunión de Van Halen.   Con semejante...

Iron Maiden - Senjutsu (2021)

Calificación: **** (9) Realmente me parece increíble y emocionante el hecho de poder estar hablándote largo y tendido, querid@ lector/a, de un nuevo disco de Iron Maiden. Y aunque sé que muchos podéis imaginaros el porqué, os lo resumiré de la siguiente manera: ¿a quién no le emociona hablar de la banda más grande de la historia del Heavy Metal?   Está claro que no todos los seguidores supieron aceptar a Maiden tras el “Seventh Son Of A Seventh Son” (motivos que no entiendo, pero habrá que respetarlos) con esa típica muletilla de “yo les perdí la pista desde el SSOASS”. Está claro que hubo un bajón compositivo en la última etapa de Dickinson, especialmente notorio en “No Prayer For TheDying”, pero no creo que “Fear Of The Dark” baje del notable alto. Si ya entramos en la era de Blaze…sencillamente os digo que pocos discos han recibido un trato tan injusto como el “X-Factor” (1995), trabajo oscuro y rompedor que sentó las bases de los Maiden del nuevo milenio. Volvería Bruce a...

Rammstein - Zeit (2022)

Calificación: **** * (9) La maquinaria alemana sigue dando sus frutos. Lo nuevo de Rammstein suena por momentos como un logrado y sorprendente retorno a sus primeros esfuerzos discográficos, aunque tampoco renuncia a incluir elementos más contemporáneos, convirtiéndola así en una de sus obras más ambiciosas y variopintas.  En sus casi tres décadas de trayectoria, Rammstein ha logrado hacer algo de lo que no todas las grandes bandas de Rock y Metal pueden presumir: no dejar a nadie indiferente. No todo el mundo ha sido receptivo con el estilo musical de una de las bandas precursoras del Industrial Metal, así como por sus letras y videoclips, los cuales casi siempre suelen tratar temas que despiertan polémica (no olvidemos el más reciente revuelo despertado por el videoclip de “Deutschland” en el que, durante algunas escenas, aparecían vestido de judíos cerca de ser ahorcados para luego alzarse y ejecutar a las tropas Nazis). Podría decirse, si me lo permiten, que estamos habla...

Atomic Rooster - Circle The Sun (2025)

Calificación: *** * *(7,5) Pocas personas hubieran apostado un duro por el regreso de Atomic Rooster en 2025, aquella banda británica fundada por el teclista Vincent Crane allá por 1969 que, aunque siempre quedó relegada a un segundo plano en la historia del Rock, firmó en sus primeros años obras fundamentales para el desarrollo del proto-metal y el Rock Progresivo, con discos imprescindibles como “Death Walks Behind You” (1970), “Made In England” (1972), “Nice ‘N’ Greasy” (1973) o el salvaje “Atomic Rooster”, que sin dudar incluiría entre mis álbumes predilectos de la célebre NWOBHM. Aunque esta resurrección cuenta con la aprobación de la viuda de Crane, lo cierto es que algunos seguidores no se han mostrado del todo conformes con que el proyecto mantenga el nombre de Atomic Rooster cuando solo queda un miembro original en sus filas: el guitarrista y vocalista Steve “Boltz” Bolton. Le acompañan Adrian Gautrey (teclados/voz), Shugg Millidge (bajo) y Paul Everett (batería). No seré y...

Aerosmith - Night In The Ruts (1979)

Calificación: **** * Si algo nos ha enseñado la historia es que en la vida, por muy fuerte o persistente que parezca o sea, nada es eterno. La caída del Imperio Romano es un claro ejemplo de cómo hasta el más poderoso y dominador en cualquier momento puede ver cómo su castillo de naipes de viene abajo. Un caso similar, aunque en menores dimensiones si lo comparamos con los romanos, lo encontraremos en esta reseña. Aerosmith, ese quinteto de amigos que a principios de los 70 se habían unido para, poco a poco, ir ascendiendo hasta conseguir el reconocimiento internacional por su música gracias principalmente a "Toys In The Attic" y "Rocks", comenzó poco a poco a caer en desgracia, teniendo consecuencias a corto plazo muy graves en el núcleo de la banda. Ya en las sesiones de grabación del notable "Draw The Line", las tensiones entre algunos de los miembros comenzaron a palparse. La hostilidad se acrecentaba, además, por el excesivo consumo de ...