En
la noche del 18 de marzo, como suele ocurrir rutinariamente, me encontraba
preparando artículos y reseñas para el Blog mientras escuchaba a algunos de mis
artistas preferidos, cuando de repente el Twitter me hundió el día con cuatro
palabras: Chuck Berry ha muerto.
El
shock pronto derivó en mucha tristeza. Se marchaba una institución musical de
verdad, que había cambiado por completo el devenir del mundo gracias a su voz y
su guitarra. No es que fuera una noticia completamente inesperada ya que Chuck
tenía una edad muy avanzada, 90 años, pero eso no consuela a nadie.
Hablar
de Chuck Berry es, en pocas palabras, lo mismo que hablar del "Padre del
Rock". Aquel joven negro imprimió al Blues un sonido más duro, más
rebelde...el Rock había nacido para quedarse. Junto a sus coetáneos, véase
Little Richard o Jerry Lee Lewis, esta música comenzó a invadir las emisoras de
radio poco a poco. Sin embargo, en la sociedad americana en la que Berry despegó
como artista predominaba un odio a la raza negra que había derivado en muchos
casos en la segregación de estos, así como en numerosos conflictos y
situaciones racistas. La gente más conservadora en los Estados Unidos, ante la
fama que poco a poco Chuck estaba consiguiendo, se aferraron a crear una
campaña de odio y repudia a este bajo los argumentos de que "era
negro" y que había estado dos veces en la cárcel.
Me
imagino la espuma que los conservadores de Estados Unidos tuvieron que echar
por la boca cuando Chuck Berry comenzó a aparecer constantemente en televisión
y en la radio. Existe una actuación muy famosa del artista en un programa para
la televisión francesa en 1958 donde "el morenito" brilló con luz
propia ante la atenta mirada de un público completamente de blancos que,
asombrados, miraban y escuchaban a aquel genio de las seis cuerdas, mientras
esperaban a que terminara la canción para premiarlo con una cálida ovación.
Como siempre, la música siendo un arma más eficaz que la política para cambiar
el mundo.
Poco
tiempo después, Estados Unidos y el mundo entero viviría la explosión de un
fenómeno de masas...Elvis Presley. Su increíble voz, su capacidad de seducción
y su color de piel fueron claves para convencer a la industria musical. Si
Elvis Presley era blanco y en la sociedad los que mayor poder adquisitivo eran
los blancos, era "necesario" convertirlo en un ídolo de la juventud
que vendiera sus discos como churros. Por ello se le apodó "el rey del
Rock. Elvis fue un genio y tenía un talento arrollador, las cosas como son,
pero el Rock ya estaba inventado en aquellos tiempos por un señor negro que
nunca se vendió a una compañía, ni grabó películas infumables para Hollywood. El verdadero "Rey del Rock" se llamó
Chuck Berry.
La
gente ignora algunos hechos que Chuck hizo por la sociedad, y se quedan
simplemente en la creación del Rock, que no es poco. El guitarrista, consciente
de la marginación que su raza vivía en aquellos tiempos, optó por fundar en
1958 el Club Bandstand, situado en San Luis, su lugar de residencia, en el cual
permitió la entrada de clientes sin hacer ningún tipo de distinción por su
raza, lo que fomentó el baile entre negros y blancos, todo un hito para
aquellos tiempos.
El
sonido que Chuck había creado con su guitarra (el primer "guitar
hero" indiscutiblemente) y su voz fue la base sobre la que nacieron las
bandas y artistas más queridas y famosas del Rock: The Rolling Stones y AC/DC,
ambas siempre han reconocido su amor y fanatismo por Berry, The Beatles, The
Who, The Animals, The Yardbirds, Led Zeppelin, Aerosmith, Kiss, Motörhead (Chuck
fue el gran héroe de Lemmy), Rush, Jimi Hendrix, ....y así podría seguir hasta
el final de los tiempos.
Con
pena, pero también con agradecimiento, admiración y cariño despido con este
artículo a un símbolo cultural que es el principal "culpable" de que
el Rock, y todos sus derivados (Hard-Rock, Heavy Metal, ...), sea el mejor
género musical que ha existido, y que existe.
Hasta
siempre Chuck. Descansa en paz.
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